Cada año, millones de estadounidenses sufren las terribles consecuencias de un mal diagnóstico o de su total ausencia. Sus vidas se sumergen en la confusión, dudando incluso de sus propias facultades mentales, cuando los médicos les dicen una cosa y sus cuerpos, otra. Y aunque los profesionales médicos luchan incansablemente por comprender sus particulares condiciones, en ocasiones es tan difícil acertar con el diagnóstico que pasan años sin que los afectados consigan levantar cabeza. ‘Diagnósticos misteriosos’, que se estrena el jueves 8 de febrero a las 21,45 horas en DKISS, llega al canal para mostrarnos una serie de impactantes casos reales en los que esta desconcertante situación ha conseguido llevar a la desesperación a sus protagonistas.
Gracias a ‘Diagnósticos misteriosos’ conoceremos casos conmovedores, como el de Carson, el primer hijo de la pareja formada por Jeff y Dina Kuolt. Nada más llegar a casa con el recién nacido, tuvieron que visitar urgencias debido a que el pequeño manifestaba una fiebre muy alta. Sin embargo, las pruebas no indicaban ninguna anomalía y no encontraron la causa de que la temperatura del bebé subiera y bajara sin causa aparente. Después de seis días en el hospital, su temperatura finalmente se estabilizó y fue dado de alta con la salud restablecida. Sin embargo, en el chequeo de los tres meses, Carson manifestó un comportamiento extraño: al ponerle la inyección con las vacunas, el pequeño ni echó una lágrima ni se inmutó. Según las enfermeras, esto era un poco extraño, pero entraba dentro de lo normal. Sin embargo, esta insensibilidad continuó manifestándose, haciéndose especialmente evidente cuando el niño comenzó a caminar, sin llorar en absoluto con sus numerosas caídas. Desesperados por ayudar a su hijo, los Kuolts volvieron a consultar con su médico. ¿Será su doctor capaz de evitar que Carson se lastime a sí mismo antes de que sufra un daño irreversible?
El nuevo programa de DKISS también nos mostrará el caso de Martha Bryce, una mujer de 30 años sana y activa, que de repente sufrió una crisis que le hizo perder el conocimiento. Martha fue llevada de inmediato al hospital más cercano y sometida a todo tipo de pruebas para comprobar que su cerebro estaba bien. Pero solo unos días después de regresar a casa, experimentó un nuevo y extraño síntoma: varias veces al día, Martha sentía que estaba punto de desmayarse. Durante cuatro años, Martha tuvo que lidiar con esa extraña sensación que se manifestaba de forma regular, hasta que sufrió un segundo ataque mientras cuidaba a su hijo de dos años y medio. Una vez más, Martha se sometió a un exhaustivo estudio neurológico, pero todas las pruebas resultaron negativas. ¿Cuánto aguantará Martha antes de que los médicos se tomen en serio su caso y den con la causa y la solución para sus ataques?
Jueves 8 a las 21.45h
