Es el año 2003, justo antes de la Guerra de Irak, cuando Gran Bretaña y Estados Unidos buscan una excusa para invadir el país asiático. Katharine Gun (Keira Knightley) es una traductora del Cuartel General de Comunicaciones del Gobierno británico que recibe un correo electrónico confidencial que insta a espiar a miembros de la ONU con el fin de aprobar la resolución para ir a la guerra coaccionando a representantes de varios países.
Esta información probaría la colaboración entre los gobiernos de Gran Bretaña y Estados Unidos para asegurar el conflicto armado de forma fraudulenta. Intrigada por el correo, lo imprime y se lleva la copia física. Katharine intentará probar la autenticidad de esta información que, si fuese publicada, supondría una acusación muy grave.
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